La exposición virtual Eros de la lejanía de Roberto Carril Bustamante recopila las visiones del artista, metáforas de aquel «mundo profundo donde no hay distancias» de otro cubano olvidado, condenado al ostracismo; uno de los grandes de la literatura universal: Jose Lezama Lima. Van apareciendo ante mí imágenes de músicos espectrales, barcos de papel surcando el océano, que recuerdan la tragedia del éxodo en balsas; figuras sugerentes, con el fuego de la creación en las manos; otras que parecen meditar en soledad sobre un trozo de árbol o que parecen regalar y soplar a sotavento aliento de vida. Es verdaderamente esperanzador ver que la obra de Lezama Lima vive, emergiendo de los rincones a donde fue confinado por sus verdugos, y desde dónde fue olvidado y negado por los mediocres y oportunistas que un día se titularon sus amigos. Qué gran regalo ver cómo esta obra se materializa a través de otro artista.

Gracias Roberto.

Mike Porcel

Músico. Miami (2021)

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[…] El disco además lleva el diseño y la obra de otro grande de las artes y la pintura, Roberto Carril Bustamante, quien magistralmente supo introducirse en el mundo extraordinario de Mike Porcel y seguir habitando su íntima y propia grandeza. […]

Mike Porcel, más druida que nunca. zoepost.com
Zoé Valdés
Escritora. Francia (2021)

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Conocí los primeros cronopios y bichos insospechados, andarines y bulliciosos que Roberto nos lanzó desde la azotea de su casona habanera, donde el olor de las pulgas de un perro gigante contrastaba con las musarañas de un poema de Lezama o el sonido de unas castañuelas, legítimas, que se perdía en la música de una ciudad sitiada de consignas. Allí nació esta obra que continúa en esta sala y que asombra por la ingenuidad y la paciencia de un artista que recurre al paisaje interno de su voz —su poesía—, sin prejuicios, ni normas, sacudiendo sus bichos eclécticos e irónicos al paso de su tiempo. El simbolismo no evade la realidad. Las anécdotas que recoge El Gran Tutor o la simulación que aparece en El Danzón Eterno “retratan” al artista, lo sitúan en su tiempo, en un contexto adecuadamente insólito de la pintura contemporánea cubana, nacida en la simulación y en el no olvido de sus ancestros y en el que se destacan las figurillas de Portocarrero, sobre todo en sus Floras que definieron una ciudad nacida de la Conquista y el atropello.Los cronopios de Roberto Carril nacieron después del paso de un huracán. mirando la Guerra de las Galaxias o, quizás, en una cola de pan o mirando los güijes de un ballet y las estridencias del Heavy Metal que guardaba celosamente bajo la almohada, al lado de los pasodobles y los aullidos irrepetibles de los perros hambrientos que molestaban las tardes sudorosas de una Habana consumida en la nostalgia.

José Rivero García.
Editor, escritor y periodista. Miami (2006)

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Roberto Carril se lanza en otra dirección mucho más crítica y ácida, hacia la denuncia del saqueo desmedido de aquellas tierras que lo fueron todo. Conmovido el espectador ante sus cuadros, resuenan como gritos en la memoria los versos de J.L. Escudero: “Han secuestrado el universo. / cometieron el gran crimen / ocultos bajo las máscaras…” y si más tangible es su denuncia, también sus obras denotan una estética actual donde se insertan ciertos elementos del cómic (que no cómicos) compaginados, sin embargo, con un mundo mágico desbordante y plenamente surrealista que enlaza con el mejor Bosco por la infinitud de sus detalles y el ambiente de pesadilla en que parecen acontecer los hechos con una fantasía iconográfica sin límites.

Fernándo Rincón
Crítico. El Punto de las Artes. España. (2006)

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[…] se hace patente su dominio de la técnica, y abunda la historia de una mitología muy original, en la que uno se atreve a adivinar la poesía que en ellos han impregnado los chichiricús, las ciguapas y los jigües, esos personajes tan familiares para la mayoría de los presentes. En el abigarramiento de sus formas se esconde un lenguaje a base de códigos figurativos del legado cultural autóctono cubano, donde el humor es su principal característica.

Hosanna Abela.
Especialista Artes Plásticas. España. (1997)

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[…] surgen paisajes que dejan de ser metáforas de color para constituir el discurso en sí, proponiendo una relación más discreta entre los personajes que pueblan su mundo y que Roberto mezcla y conjuga con la magia del prestidigitador que abre su caja de maravillas ante nuestros ojos, infantiles entonces por obra de su magia. Su obra refleja la capacidad humana para amar, amarse a si mismo, a lo que somos en virtud de los que fueron y los que seremos; […]

José M. Villa.
Diseñador. Cuba. (1992)

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[…] diablos y ángeles manejados con humor, un manejo “barroco contemporáneo” de la superficie pintada —por lo abigarrado de los elementos de sus lienzos y grabados— y una marcada tendencia hacia el predominio de la línea, incluso en los óleos que no desprenden de sí su cualificación de dibujo-antecesor que fueron antes de llevar color.[…]

Diario de Yucatán.
Mérida. Yucatán. México. (1992)

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[…] Liberados por la imaginación y el pincel de Carril Bustamante, estas figuras de retablo se mezclan con una nueva realidad. Angeles y diablos que se relaciona con nosotros en una fiesta de símbolos y en un posible discurso en el que se ventilaría los problemas del hombre actual. […] Roberto maneja un territorio poético que resuma un aire intemporal, con su música, sus ardores sexuales, sus inquietudes anticipatorias y una mística de alegría para la creación de seres menos complicados que nosotros. […]

Eduardo Luján-Urzaiz
Por esto! Mérida, Yucatán. México. (1992)

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Siempre me gusto el "Guernica" y nunca lo imaginé hasta enfrentarme a tu mundo, joven pintor de apenas 20 años, este "Guernica distinto" inocente, creativo con luz propia, que abre caminos a tu obra, llena de lo distinto.

Ivis Cuadras
Especialista Artes Plásticas. Cuba. (1991)

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[…] avanza hacia una pintura que puede ser a veces el reverso “criollo”, “burlesco”, y a la vez ingenuo de una percepción “rococó” contemporánea. Es el suyo, un vínculo involuntario con la lógica recuperadora y antisolemne del postmodernismo […]

Manuel López Oliva.
Crítico y pintor. Cuba (1991)

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Egresado de la Academia Nacional de Arte de San Alejandro (especialidad de grabado) en 1989, el joven artista Roberto Carril Bustamante ha recorrido en corto tiempo un intenso camino de búsquedas artísticas que hoy le permiten el raro privilegio de sorprender.

Desde su primera exposición personal (Museo de Plaza de la Revolución, noviembre de 1989), hasta esta muestra que ahora ofrece al público en el Gran Teatro de La Habana, se evidencia una rápida asimilación de influencias que cobran personalidad propia en su original concepción estética, realizada por un evidente salto de calidad formal tanto en la plasmación compositiva de los temas como en la factura misma de los cuadros.

La difícil técnica del óleo parece aquí no entorpecer la concentración del artista, quien con sus Ángeles en una noche de preguntas nos introduce en un universo onírico, lleno de alucinaciones y sugerencias, que con frecuencia se nos antojan de una ¿ingenua? insinuación lúdica. Estos lienzo, ora inquietantes, ora simpáticos, evocadores siempre, se presentan al espectador como un laberinto sumergido en las complejas profundidades de la imaginación y el recuerdo. Espiral envolvente y seductora que nos hace mirar hacia dentro de nosotros mismos para obligarnos a sonreír con el sobrecogedor deleite que produce una verdad desnuda.

Pompeyo Pino Pich
Crítico. Mayo-Junio. Cuba (1991)

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[…]si busca un creador que no bebe en fuentes ajenas y que es capaz de abrir una caja de Pandora plena de sugerencias oníricas, vaya al encuentro de los ángeles de Carril Bustamante.

Ada Oramas.
Periodista. Cuba( 1991)

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En esa escenografía real, sus seres —simpáticos, unas veces, otras, serios, inquietos— constituyen los recuerdos y sentimientos de los humanos. Una manera original de hacernos ver por dentro. Hay de ingenuo, de gráfico, de poeta en esta convergencia […]

Toni Piñera.
Periodista. Cuba (1991)

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Nos muestra lo que siente y así lo presenta; con una lírica fantasía, en un nuevo universo de relaciones entre seres, de la cual él forma parte en muchas de sus obras. Su coexistencia con juguetones ángeles, meditativos diablillos y todos los demás elementos que componen su iconografía artística, rica en personajes y conceptos, donde el amor y el humor se entrelazan.

Lázaro Gracia.
Diseñador gráfico, Pintor. Cuba (1991)

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[…] El también cree, como el artista del paleolítico, en la capacidad del arte para influir sobre la vida; solo que esto hoy solo ocurre por la agudeza crítica de la obra. De ahí que con técnicas naturalmente contemporáneas, sus dibujos, grabados, óleos y temperas, estén inundados de acotaciones críticas sobre su entorno social e incluso familiar: […]

Pompeyo Pino Pich.
Crítico. Cuba (1989)